Por V. M. Vaserchod

          “…Afrodita, fuente de aguas vivas donde muchos han calmado su sed.; aguas turbulentas donde muchos se han ahogado para siempre...”

V. M. Kelium zeus induseus

Las aguas, no sólo reproductoras sino autoregeneradoras, del bautismo, como sagrado ritual sexual crístico.

Como dijeron los dioses inspirando a el poeta,

“mujer, sin tí nada es posible,”

Retumba con macabros ecos neoliberales en la contemporaneidad la soberbia sentencia de guerra contra la vida y el amor  eruptada en la baja edad media por  Francis Bacon,  fundador del método experimental de la ciencia moderna : “a la naturaleza como a la mujer hay que torturarla para extraerle sus secretos”, partida de nacimiento con la que la “diosa razón”,  en aparente lucha contra el oscurantismo de la bestia católica inquisitorial, prosigue por otros medios su desprecio y persecución a la mujer y a la madre tierra, los laboratorios de la vida.

¿Será que (Francis) Bacon fue oficiante en las bacanales, donde se convirtieron a las evas en mujeres, que mujían en los tiempos degenerados de la Lemuria, bajo los experimentos genéticos de Sodón en las bacaciones para verles el ano en los versoles, que ellos llamaron ver-anos?

El machismo, como forma de legitimación del poder bestial babilónico para la acumulación de riqueza material y justificador de la violencia como forma natural de relación social y económica es expresado hoy en la ética del neocanibalismo sionista (léase neoliberalismo), que necesita someter y contaminar /prostituir a la naturaleza y a la mujer, como el vampiro que  necesita alimentarse de sangre.

Correlativamente, este machismo, como conducta aberrantemente antinatural y antisocial, que destruye la naturaleza y discrimina a la mujer, da lugar a la proliferación del homosexualismo : Comida sintética (de sin teta, sin madre), cadavérica y transgénica, degenera los circuitos neurohormonales y sexuales de hombres y mujeres junto con los ritmos modernos de vida (moder-no = no madre, según el V.m. Isaí).

La intuición, más desarrollada en la eva, como forma de kaptar totalidades, es desacreditada como precientífica e infantil por las derechas y por las falsas  izquierdas, y la ternura que emana de la naturaleza femenina, son altamente subversivas, como la inocencia de los niños: La sociedad del anticristo, basada en la mentira, las apariencias y el aprovechamiento del otro, con su razón instrumental, no las tolera.

Resuena aún este gruñido “iluminista”, confundido con el crepitar de las hogueras del oscurantismo de la bestia sanedrínica-inquisitorial (¡¡¡ 9 millones !!! de mujeres en tres siglos, quemadas como “brujas” en la edad media) de una iglesia que nació y ha vivido en una ciudad muy lujosa de SÓLO HOMBRES, con grandes inversiones de capital en las multinacionales sionistas, donde según su nombre mismo dice, se vaten el ano, produciendo cortocircuitos bio-energéticos-genéticos al votar sodómicamente sus semillas-cristo en el estiércol del otro, destruyendo sus almas y el planeta  y volviéndose desalmados, por leyes que la ciencia sin corazón y la religión sin mujer no conocen.

Hombres así y mujeres amachadas por el poder han impuesto e imponen la globalización neoliberal en Colombia y el mundo como el reino mundial de la bestia, profetizado en el Apocalipsis de Juan. Depende principalmente de sus mersedes que eso no ocurra y de los varones con voluntad para ser guerreros templarios mutantes alquímicos de su energía genética como enseñaron Jesús el cristo y los demás cristos que ha encarnado en la esfera.

Sólo tú mujer, convertida en eva, puedes reencantar el mundo  como, por ejemplo, el ángel mártir con cuerpo de eva Juana de Arco, tea de Dios que iluminó el medioevo; sólo tú con tu poder natural puedes hacer que como en los tiempos de la Atlántida y la lemuria o la Grecia Arcaica y la América antigua o Etachtitlán  volvamos a ver y conversar con el hiperespacio, con las hadas de los bosques, con las ninfas y nereidas de las aguas, los silfos y sílfides del viento o las salamandras del fuego y las voces y los dragones de las piedras como el sexo de los dioses caídos, para así sentir respeto y amor por todo lo que nos circunda, sentir que la naturaleza somos todos con nuestra razón incluida. No importa que la antropología castrada de los fornicarios* de las derechas y de las  izquierdas, elaborada en 300 años de colonialismo, se burlen de estos “cuentos infantiles”; no importa que las religiones poderosas de Estado nos escupan altaneras como al cristo el epíteto de panteístas paganos, ellos asesinaron al cristo y ocultaron y prostituyeron sus doctrinas liberadoras.

Tributamos hoy un sentido homenaje a las mártires de Chicago, a ese centenar de valerosa evas que el 8 de marzo de 1908 fueron encerradas y quemadas vivas en una fábrica textil  por la avaricia y la mezquindad del poder para la acumulación y la muerte de la bestia encarnada en pestilentes fornicarios*, asesinos de la energía krística.

Para que sólo nos estalle la risa feliz de los niños y los ancianos en un mundo reconciliado con Dios y la naturaleza y no el tableteo terrorista de las armas publicitarias, militares, económicas y financieras de Bush, el vaticano y la iglesia católica, el sionismo y los imperialismos, para que cesen los allanamientos a el Templo Vegetal Sakroakuarius y la persecución a los Kristos Rojo y Vlanco, Jha kelium Zeus Induzeus y Samael Joab Wathor Weor.

 

Que Dios las vendiga, evas tao-judías de verdad, guerreras de la lúz, hoy y todos los días, en su lucha por convertir a las mujeres en Evas.

*Fornicario: Hombre que bota 400 millones de espermatozoides en cada eyaculación cometiendo un genocidio y privando a su conciencia o alma del vino sagrado de la luz, es decir, de su alimento; o mujer que expilsa su vitriolus o su energía sexual sutil Cada vez el número de espaematpzoide y el vitriolus es mernor en los hombre y mujeres.